El concejal de Urbanismo, David Estrada, acompañado por el técnico municipal, Juan Frasés
El Gobierno Municipal del Ayuntamiento de Aranjuez ha denunciado hoy en rueda de prensa la presunta desaparición de 10.000 metros cuadrados de adoquines de las obras realizadas en el acceso norte a la localidad, lo cual van a poner en conocimiento de la Fiscalía y de los Juzgados de Instrucción.
Según el concejal de Urbanismo, David Estrada, "estos adoquines se encuentran en paradero desconocido, a pesar de que el contrato con la empresa que ejecutó la obra, Nuevo Arpegio, establecía que estos debían ser trasladados a los Almacenes Municipales para su posible reutilización".
Sin embargo, según Estrada, "nos consta que no ha habido ninguna entrada de este material, que podría estar valorado en 200.000 euros y equivaldría a una superficie de dos campos de fútbol, y del que solo se reutilizó una parte en un tramo de la calle de la Reina".
Asimismo, el concejal de Urbanismo ha asegurado que el Ayuntamiento ha suspendido la recepción de la obra, ya que consideran que habría que subsanar deficiencias relacionadas con la pavimentación, el alumbrado, la semaforización, los bolardos y la colocación de estatuas como la de Fernando VI y Santiago Rusiñol.
Por ello, el pasado mes de diciembre la Junta de Gobierno Local presentó un acuerdo de correcciones, habiendo recibido el visto bueno de la Comisión Local de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid hace una semana, según ha indicado Estrada.
En este sentido, los socialistas han pedido a la empresa que realice un nuevo proyecto para arreglar las modificaciones señaladas.
Al mismo tiempo se niegan a aprobar el modificado realizado por Nuevo Arpegio al considerar que se presenta cuando las obras ya están terminadas, además de haber detectado que algunos de los trabajos efectuados no coinciden con lo recogido en papel.
Respecto a la supuesta desaparición de adoquines, Estrada ha afirmado que se han pedido explicaciones a la Comunidad de Madrid, como responsable de la obra, y a la empresa adjudicataria, sin que hasta la fecha se haya obtenido respuesta.
Sobre este asunto, fuentes del anterior gobierno del PP, han puesto de manifiesto que "nos consta que hay un informe del director de la obra, en el que se aseguraba que los adoquines no eran aptos para su reutilización, por lo que fueron llevados al vertedero, corriendo con los gastos la propia empresa".
En cuanto a las obras "estás se realizaron -según las mismas fuentes- dentro de la legalidad, y la empresa contaba con la autorización de la Dirección General de Patrimonio Histórico, aunque el acta fuera remitido con posterioridad, el 2 de julio, ya con el PSOE en el Gobierno Municipal".
Se permitió a la empresa ejecutar las obras, ya que al tratarse de unas actuaciones de servicio público, no se podía tener paralizada la ciudad.
También la comisión local recogió el informe del entonces Jefe de la Policía Local, Leonardo Lafuente, en el que este solicitó que se colocaran medidas de seguridad como los semáforos y bolardos, ya que de lo contrario no estaba garantizada la protección de peatones y vehículos.
Según el PP "lo que quiere el PSOE es hacer modificaciones a una obra ya terminada y que les salga gratis, pero no pueden pretender que sea la misma empresa la que vuelva a hacer otro proyecto".