La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha negado hoy que las urgencias del Hospital del Tajo estén colapsadas, tal y como asegura el grupo municipal de Aranjuez Ahora del consistorio ribereño.
Según ha denunciado en un comunicado esta agrupación, que cuenta con cuatro concejales en el Ayuntamiento de Aranjuez, "estos días hay decenas de personas esperando hasta 3 días en los pasillos por camas que siguen cerradas, lo que vuelve a poner de manifiesto la insuficiencia del centro sanitario".
Añaden que "ante el inicio de la habitual epidemia de gripe, las únicas medidas de refuerzo puestas en marcha por el Servicio Madrileño de Salud se resumen en la apertura de 10 camas a última hora, a las que se añadirían dos más en función de la evolución de la demanda esta semana".
A ello, se suma, según Aranjuez Ahora, el hecho de que se estén realizando contratos a profesionales que solo tienen una vigencia de quince días.
A estas cuestiones, fuentes de la Consejería de Sanidad, han declarado a EFE que "en este momento no hay colapso ni saturación en el Hospital del Tajo, aunque sí mayor afluencia, por lo que se están adoptando medidas excepcionales por la gripe estacional".
En este sentido "se han abierto 10 camas de la T 4 y se podrían abrir 3 más si fuera necesario, pero ahora mismo no hay ningún paciente pendiente de ingreso".
Asimismo, en lo que va de semana se ha contratado a 7 enfermeros, 7 auxiliares de Enfermería, 2 médicos para reforzar las Urgencias y otros 2 para Medicina Interna, además de un pediatra también para las Urgencias, que se incorpora mañana".
En cuanto a que estos contratos sean quincenales, las mismas fuentes han precisado que estos se prolongarán en función de las necesidades, de hecho, está previsto que el pico más alto de gripe se alcance la próxima semana.
Para Aranjuez Ahora estas medidas son insuficientes y consideran prioritaria la apertura definitiva del pabellón que permanece cerrado, ya que, según afirman, el convenio de la Comunidad de Madrid planteaba abrir la T 4 en 2017, con lo que se ampliarían las camas de hospitalización de 90 a 116.
Esta "política de parcheo" -dicen- "cuando existe un pabellón entero con 30 habitaciones cerradas por falta de personal que las mantenga y atienda es algo inadmisible, que exige soluciones ya reivindicadas en repetidas ocasiones y que se seguirán exigiendo desde todos los ámbitos".
A esto suman, según añaden, problemas en la atención especializada. "Se están dando, por ejemplo, citas para hacer escáneres con hasta seis meses de retraso, y las citas de revisiones para especialidades tras pruebas diagnósticas pueden demorarse hasta nueve meses, y en periodos vacacionales no se cubren vacaciones ni bajas, lo que acrecenta esa sensación de falta de recursos humanos y materiales que afecta seriamente la prestación sanitaria en nuestra ciudad".